Hace unos meses iniciamos una serie de entrevistas a cocineros de restaurantes con los que trabajamos. Lo hicimos hablando con Robert, de Koku Kitchen. Hoy os presentamos una nueva entrevista con Oriol Llavina, chef del restaurante El Cigró d’Or, de Vilafranca del Penedès.

Este restaurante vilafranquino está situado en un lugar único, justo encima del mercado de carne. A continuación, Oriol nos descubre su cocina:

¿Cómo empezaste como cocinero?

La cocina y la comida me gustaban. Me interesaba un oficio que fuera bastante práctico y un punto creativo. Cuando acabé COU estudié cocina. Aun así, siempre había hecho cositas. Estudié en el Intermunicipal del Penedès, y allí cada año en las jornadas culturales se hacían talleres. Cada año participé como tallerista. El primer año lo hice de Scalextric, que era lo que me motivaba en ese momento. El resto de años los hice siempre de cocina. Empecé porque era un oficio que me gustaba y en ese momento era un trabajo que ya estaba bien visto respecto años anteriores. En el 95, 96 o 97, cocineros como Santi Santamaria o Ferran Adrià ya salían en los periódicos.

Has dicho que buscabas un oficio que fuera un poco creativo. ¿Crees que los cocineros son artistas?

No, creo que quizá hay algún cocinero muy concreto que se podría considerar artista, pero yo no conozco a ninguno. Creo que lo que sí que somos es artesanos.

¿Cómo fueron los inicios del restaurante?

Este restaurante lo montamos hace unos diez años. Inicialmente estaba en Gelida, y el 2012 pasó al espacio actual.

¿Cómo definirías vuestra cocina?

Hacemos cocina catalana un poco actualizada.

Vuestro restaurante se encuentra justo encima del Mercat de la Carn de Vilafranca del Penedès. ¿Cómo influye esto en vuestra filosofía para escojer los productos?

Nosotros hacemos una cocina honesta, y esto lo digo cada vez con más sinceridad. Lo digo porque años atrás quizá no hacía demasiado caso a esto del slow food, pero ahora nos hemos sumado a esta filosofía y la verdad es que cada vez buscamos más el producto auténtico y los valores de proximidad, ecológicos y sostenibles. Es lo que realmente nos interesa. Buscamos un producto que sea de temporada, y aquí abajo tenemos un buen género. En el mercado hay buenos payeses y el pescado viene de Vilanova.

¿Cuál de nuestros cavas te gusta más?

Sin duda, el Gran Reserva Familiar Millenium.

¿Con qué platos de vuestra carta crees que más encaja?

¡Puede encajar con todos! Pero, especialmente, con los canelones crujientes de pollo.

 

¿Quieres saber más del cava que nos recomienda Oriol de El Cigró d’Or?


 

Gran Reserva Familiar Millenium

Dorado intenso, complejo y elegante en nariz. Aromas de crianza, notas de repostería, fruta confitada, membrillo. Fresco, sabroso y con el carbono bien integrado. Final muy largo.

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